Cerca de tres centenares de personas han acudido a ese acto para evitar el desalojo de una pareja y su hija, convocados por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Madrid, a la que se habían unido entidades, como la Federación de Asociaciones de Vecinos de Madrid, el Movimiento 15-M, Democracia Real Ya y ATTAC.
Lara estaba desde primeras horas de la mañana y, en un principio, se negó a hacer declaraciones a los medios que se lo solicitaban.
Con posterioridad sí ha accedido a hablar con la prensa y en ese momento ha sido increpado por algunos asistentes con gritos como "oportunista" y "no nos representas".
Una persona le ha lanzado agua de una botella y parte ha llegado a la cara del líder de IU, según ha constatado Efe en el lugar.
Cayo Lara ha pedido tolerancia a quienes le criticaban y ha explicado que había acudido a la convocatoria a título personal, como ciudadano particular y no como dirigente político.
La Policía Nacional, que estaba presente, no ha tenido que intervenir y, transcurridos todavía algunos minutos, Lara se ha ido del lugar, después de que todos los concentrados supieran que el desahucio había sido suspendido.