Rubalcaba hizo estas declaraciones, a preguntas de los periodistas, después de asistir a la inauguración de la nueva Comisaría de la Policía Nacional en Mérida.
El titular de Interior rechazó que cientos o miles de ciudadanos “impidan” el funcionamiento de las instituciones democráticas “en las que están los representantes de millones de ciudadanos”.
Por ello, compartió la mayoría de las declaraciones que hicieron ayer los representantes de los partidos políticos de Cataluña, no así las críticas hacia su persona que hizo el PP.”La mala noticia del día para el PP siempre es responsabilidad de Rubalcaba”, según el ministro, que consideró que esto forma parte de una estrategia del PP para desgastarle.
Rubalcaba subrayó que, en aras a la seguridad, la actuación de la Policía Nacional y de la Guardia Civil allí donde tienen competencias es “firmeza con quien tiene comportamientos violentos o intimidatorios y prudencia e inteligencia con quien tiene comportamientos pacíficos”.
En Valencia y Madrid, a su juicio, han “acreditado” esa firmeza en defensa de los legítimos intereses de los ciudadanos.
El Govern reconoció fallos en el dispositivo para la seguridad de los diputados durante el asedio de al Parlamento catalán e incluso el conseller Felip Puig ha pedido disculpas, aunque centra sus críticas en los “profesionales del incidente”, en los que recaerá un “castigo ejemplar”.
Recuperada la normalidad en la cámara catalana, el presidente de la Generalitat, Artur Mas, y el conseller de Interior, Felip Puig, hicieron autocrítica al admitir que el dispositivo de ayer se quedó “corto” y hubo “insuficiencias” a la hora de proteger la entrada de los diputados.
El Parlament y el Ayuntamiento de Barcelona ya han decidido que se personarán en la causa judicial contra los 'indignados' violentos.
El presidente catalán, Artur Mas, denunció que los violentos actuaron siguiendo el modelo de la kale borroka y se portaron como “auténticos cafres”, por lo que vaticinó que habrá más detenciones.
Los indignados prefirieron mantener silencio y a última hora, después de que la Generalitat prometiera que buscará un “castigo ejemplar” para los que el miércoles coaccionaron a los diputados, no se presentaron a una rueda de prensa que ha quedado aplazada para hoy viernes.