El líder operartivo del grupo insurgente red Haqqani, Badruddin Haqqani, podría haber muerto en un bombardeo perpetrado por vehículos aéreos no tripulados (UAV, por sus siglas en inglés) de la Agencia Central de Inteligencia estadounidense en Waziristán del Norte, en el oeste de Pakistán, junto a la frontera con Afganistán, según han informado milicianos integristas y fuentes de los servicios de Inteligencia paquistaníes.
Las fuentes consultadas han indicado que Badruddin Haqqani, considerado como el responsable de coordinar las acciones de la red y las operaciones de contrabando de armas, podría haber sido abatido en uno de los bombardeos de esta semana en Waziristán del Norte.
"Nuestros informadores nos han dicho que ha muerto por el ataque de un drone el 21 de agosto pero no podemos confirmarlo", ha explicado una fuente de los servicios de Inteligencia paquistaníes. En caso de confirmarse, la muerte de Badruddin Haqqani sería un golpe muy importante contra la red terrorista, responsable de muchos de los ataques contra militares e intereses estadounidenses en Afganistán, donde opera en coordinación con el movimiento talibán afgano.
"Estamos seguros al 90 por ciento de que estaba en la misma casa que fue atacada por un drone el martes", ha asegurado otra fuente de los servicios de Inteligencia paquistaníes. Fuentes próximas a la red Haqqani ha afirmado que se estima que Badruddin se encontraba en la casa que fue bombardeada por un drone cuando varios milicianos estaban colocando explosivos en un vehículo que pretendían preparar para atacar a las fuerzas de la OTAN en Afganistán.
"El drone disparó dos misiles en la casa el pasado martes y mató a 25 personas, la mayoría de ellas miembros de la red Haqqani", ha dicho la fuente. Fuentes del movimiento de los talibán paquistaníes y otras fuentes integristas también han considerado que el líder operativo de este grupo insurgente podría haber muerto en el bombardeo aéreo.
Sin embargo, uno de los familiares de Badruddin ha negado que haya sido abatido y ha asegurado que continúa dedicado a sus "actividades de la yihad", en referencia a sus acciones terroristas contra militares estadounidenses y otros objetivos occidentales. "Esas reivindicaciones no tienen base", ha afirmado, en declaraciones a Reuters.