El candidato republicano, Mitt Romney, ha felicitado al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, por su reelección, al tiempo que le ha deseado "éxito" en los "numerosos retos" a los que se enfrenta actualmente el país norteamericano.
"Acabo de llamar al presidente Obama para darle la enhorabuena. Le deseo que tenga mucho éxito, porque es un momento importante para Estados Unidos. Hay muchos retos que superar", ha dicho Romney, ante cientos de seguidores en la ciudad de Boston.
A pesar de su derrota electoral, el candidato republicano ha defendido su proyecto político, subrayando de nuevo los problemas económicos del país norteamericano y la necesidad urgente de crear más puestos de trabajo.
"Este país esta en un momento crítico, los ciudadanos tienen muchos problemas. Los líderes políticos y los ciudadanos tienen que ponerse a trabajar, tenemos que trabajar de forma conjunta toda la sociedad", ha apuntado.
En este sentido, ha reiterado su compromiso con Estados Unidos. "Yo amo este país, creo en este país, y me preocupa este país, por eso me presenté a las elecciones presidenciales", ha explicado. "Creo que los principios en los que se funda esta nación deben llevarnos a un nuevo estado de grandeza", ha añadido.
En segundo lugar, el candidato republicano ha destacado el apoyo de su mujer, Ann. "Estoy seguro de que habría sido una estupenda primera dama, de hecho, ha sido eso y mucho más para todas las personas con las que ha tratado durante la campaña electoral", ha indicado.
Además, ha valorado el trabajo de su candidato a la Vicepresidencia, Paul Ryan. "Lo ha dado todo en esta campaña electoral", ha subrayado.
En la misma línea, ha agradecido el esfuerzo de los miles de voluntarios de su campaña electoral "por haber pasado tantas semanas lejos de sus familias", así como a los donantes y patrocinadores. "Han hecho un esfuerzo extraordinario", ha sostenido.
Romney ha comparecido dos horas después de conocer su derrota y lo ha hecho junto a su mujer y dos de sus hijos ante cientos de simpatizantes republicanos, aunque también ha tenido que soportar los abucheos de algunos demócratas.