Un vídeo publicado hoy, cuando se cumple el primer aniversario del derribo del MH17 en el este de Ucrania, muestra la llegada de un grupo de presuntos rebeldes prorrusos al lugar en donde cayó el aparato tras el impacto de un misil tierra-aire.
Las imágenes divulgadas por el grupo mediático News Corp Australia, que se creen fueron filmadas por los mismos rebeldes y cuya veracidad no se ha comprobado, revela la conmoción entre los combatientes al descubrir que habían derribado un avión comercial y no un avión de combate ucraniano.
Los soldados y comandantes conversan durante el vídeo con el cuartel general para tratar de averiguar qué ha sucedido, según la transcripción del vídeo.
Los diálogos, que se van intensificando por momentos, señalan la confusión hasta que reconocen que el avión derribado es una aeronave de transporte civil.
"Miren son extranjeros, son malasios", de acuerdo a la transcripción publicada por el diario "Daily Telegraph" del grupo News Corp.
Asimismo el vídeo muestra cómo los rebeldes rebuscan entre las pertenencias de las víctimas entre los escombros del aparato
La ministra australiana de Exteriores, Julie Bishop, declaró que las imágenes mostradas "son nauseabundas", pero precisó que de momento no se ha verificado la autenticidad del vídeo.
"Ciertamente es consistente con la información que recibimos hace doce meses, que el vuelo MH17 de la aerolínea malasia fue derribado por un misil tierra-aire", manifestó Bishop al Canal 9 de la televisión local.
Por su parte, el primer ministro australiano, Tony Abbott, señaló que las imágenes dan cuenta de que se trató de "una atrocidad" y no "un accidente".
"Ellos no se habrán dado cuenta de que derribaron a un avión de pasajeros, pero deliberadamente dispararon al aire contra lo que sabían era un avión de gran tamaño", añadió el mandatario australiano.
Los familiares y allegados de los 38 ciudadanos y residentes australianos que se cuentan entre las 298 víctimas que perecieron en el derribo del avión de Malaysia Airlines acudirán este viernes a una ceremonia de tributo nacional para conmemorar el primer aniversario de la tragedia.
Asimismo se desvelará una placa con el nombre de las víctimas en los jardines del Parlamento de Camberra, según la cadena local ABC.