Putin ha obtenido ya el respaldo de 56,1 millones de ciudadanos, superando en 10,5 millones los votos recibidos en 2012
El presidente ruso, Vladímir Putin, suma el 76,67 % de los votos emitidos en las elecciones presidenciales del domingo con el 99,81 % de los votos escrutados, según los últimos datos de la Comisión Electoral Central (CEC).
Tras el escrutinio de prácticamente todas las papeletas, Putin ha obtenido ya el respaldo de 56,1 millones de ciudadanos, superando en 10,5 millones los votos recibidos en 2012 (45,6 millones), cuando regresó al Kremlin tras cuatro años de paréntesis como primer ministro.
Esta histórica victoria, que supera de largo todos los resultados que había obtenido en anteriores comicios presidenciales, le permitirá permanecer en el Kremlin hasta 2024.
La participación alcanzó el 67,47 % del censo electoral, dos puntos por encima de la registrada hace seis años, aunque la diferencia en relación a los últimas comicios fue mucho mayor en grandes ciudades como Moscú, habitualmente las más desencantadas con los procesos electorales.
Putin recibió más del 90% de los votos en cinco regiones o repúblicas del país, entre ellas Crimea, que celebraba hoy el cuarto aniversario de la anexión rusa y cuyos habitantes participaron por vez primera en unas presidenciales.
También superó el 70 % de apoyos en las dos principales ciudades del país, Moscú y San Petersburgo, tradicionales graneros de la oposición más radical al Kremlin.
En su primera comparecencia ante la prensa tras proclamar su victoria en los comicios, Putin negó que se plantee, "de momento", reformar la Constitución para poder seguir en el poder dentro de seis años.
"Me parece que lo que usted plantea es bastante ridículo. Vamos a calcular. ¿Significa eso que yo voy a estar aquí hasta los 100 años? No", dijo.
Putin, de 65 años, ganó sus primeras elecciones en marzo del 2000, tres meses después de recibir el poder de manos del primer presidente democráticamente elegido de la historia de Rusia, Boris Yeltsin.
El segundo candidato más votado el domingo fue el millonario comunista Pável Grudinin, que logró el 11,79 % de los votos; seguido por el ultranacionalista Vladímir Zhirinovski, con el 5,66 %.
La periodista Ksenia Sobchak, la tercera mujer en participar en unos comicios presidenciales en la historia de Rusia, logró el 1,67 %, mientras que el histórico líder liberal Grigori Yavlinski consiguió el respaldo del 1,04 % de los votantes.
Los otros tres candidatos presidenciales no superaron la barrera del 1 %.
Unos 110 millones de rusos estaban llamados a las urnas en unas presidenciales catalogadas de "transparentes" por la CEC, pero que, según el candidato comunista, fueron "sucias" y, de acuerdo a la oposición, estuvieron marcadas por numerosas irregularidades.