El tiempo en: Arcos
Publicidad Ai

Mundo

Superado el apagón, los venezolanos retoman la normalidad de la crisis

La gran mayoría de los venezolanos amaneció hoy con luz en sus hogares después una oscuridad que se prolongó al menos 72 horas

Publicidad Ai
Publicidad Ai
  • Venezuela. -

Venezuela intentó este miércoles retomar la normalidad de su crisis, que incluye desde hace años desabastecimiento e hiperinflación, tras el fallo eléctrico iniciado el jueves del que aún no se sobreponen algunas comunidades y cuyo efecto macroeconómico puede suponer la caída de hasta dos puntos en el PIB.

La gran mayoría de los venezolanos amaneció hoy con luz en sus hogares después una oscuridad que se prolongó al menos 72 horas, en el caso de los más afortunados, y cinco días completos para los más desdichados.

Aunque varios miles de personas han corrido peor suerte pues este miércoles suman casi 140 horas sin electricidad, como ocurre en una urbanización del este de Caracas y en algunas zonas del estado Mérida (oeste).

Mientras tanto, los venezolanos que ya pueden encender el televisor procuran retomar sus hábitos propios de la austeridad venezolana, como formarse en filas a las afueras de supermercados en la busca de los escasos productos de primera necesidad.

Pero esa meta se ha vuelto más difícil las últimas horas debido a los fallos en el ya golpeado sistema de abastecimiento de alimentos y medicinas, por la dificultad de realizar pagos electrónicos en medio de las afectaciones a las telecomunicaciones y por los saqueos registrados en algunas regiones.

Solo en el estado Zulia (oeste) unos 500 comercios fueron desmantelados por turbas que robaron hasta el mobiliario en medio de una ola vandálica que arrojó un saldo de casi 400 detenidos.

El principal productor de alimentos de Venezuela, Polar, anunció pérdidas superiores a los 5.000.000 de dólares por saqueos e informó de "destrozos y daños irreparables" a varias de sus plantas productoras causados por centenares de personas.

Otras doce personas fueron arrestadas por su presunta participación en saqueos que, según dijo a Efe el gobernador de Anzoategui (este), Antonio Barreto Sira, se registraron en cinco municipios de esa entidad federal en medio del apagón.

Entretanto, el gremio de ganaderos venezolanos registró pérdidas superiores a los 5 millones de dólares por las dificultades operativas.

Al verse cortada la electricidad y, por tanto, la cadena de frío y la comercialización, casi 7.000.000 de litros de leche destinadas al consumo y a la fabricación de quesos se perdieron, lo que se tradujo en pérdidas por 4.167.704 dólares.

Además, más de 2.000 toneladas de carne se dañaron en canales agropecuarios y carnicerías al verse interrumpida la normal refrigeración.

Los alimentos descompuestos, añadió el gremio, pudieron haber servido para el consumo anual per cápita de casi 160.000 venezolanos.

El analista financiero Henkel García explicó a Efe que calcular el daño patrimonial causado por los fallos eléctricos es complejo.

"Pero inicialmente, entre daños y pérdidas estamos estimando un monto cercano o que está entre 1 y 2 puntos del producto interno bruto (...) eso daría algo entre 800 y 1.600 millones de dólares por todos estos apagones", indicó el director de la firma Econométrica.

Por otro lado, la telefonía residencial y móvil siguen presentando fallas que son más graves en las localidades más alejadas de Caracas. Sigue siendo particularmente difícil concretar una llamada de larga distancia en el territorio nacional.

En vista de ello, las principales compañías de este sector han prolongado medidas activadas el martes que incluyen la gratuidad en el servicio de mensajería de texto o en el de llamadas telefónicas, mientras persisten problemas en el uso de datos desde los dispositivos móviles.

Asimismo, el agua potable volvió a correr por las tuberías de millones de venezolanos que estaban secas desde que se produjo el apagón y el Gobierno de Nicolás Maduro estima que el 80 % del país ya cuenta con este servicio, que está racionado desde hace años.

Con todo, la entidades bancarias, escuelas, institutos y la mayoría de las empresas continuaron cerradas en acatamiento del "asueto" decretado por Maduro en medio de la contingencia que entró en vigor el viernes y que expira hoy con la excepción de las actividades escolares que seguirán suspendidas 24 horas más.

La Universidad Central de Venezuela anunció que seguirá cerrada al menos hasta el lunes mientras se normaliza la situación en Caracas, cuyo principal medio de transporte, el Metro, que es usado diariamente por cientos de miles de personas, continúa sin funcionar.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN