Los rumores de golpe se han ido intensificando desde que el pasado martes un portavoz militar, Zaw Min Tun, se negara a descartar la toma del poder
Birmania (Myanmar) se encuentra sumida en una crisis política debido a la amenaza de que el Ejército pueda dar un golpe de Estado antes de la toma de posesión del nuevo Parlamento el próximo lunes.
Miembros de la Liga Nacional para la Democracia, el partido gobernante, se reunieron anoche con representantes del Ejército, pero no llegaron a ningún acuerdo para superar la crisis, indicaron a Efe fuentes cercanas al Gobierno, al tiempo que las embajadas de la Unión Europea y varios países occidentales hicieron hoy un llamamiento a que se respete la democracia.
Los rumores de golpe se han ido intensificando desde que el pasado martes un portavoz militar, Zaw Min Tun, se negara a descartar la toma del poder por parte del Ejército tras denunciar supuestas irregularidades en las elecciones del pasado 8 de noviembre.
Al día siguiente, el jefe del Ejército, Min Aung Hlaing, señaló en un discurso ante el personal castrense que se debería abolir la Constitución si esta no se cumple, lo que ha sido interpretado como una amenaza velada en el país, que estuvo sometido a una dictadura militar entre 1962 y 2011.
La Comisión Electoral ha negado el fraude electoral en los comicios de noviembre, ganados con una mayoría aplastante por la Liga Nacional para la Democracia (NLD, siglas en inglés), liderada por Suu Kyi, al conseguir el 83 % de los 476 asientos del Legislativo.
LLAMAMIENTO DE LA UE Y ESTADOS UNIDOS
La Delegación de la Unión Europea (UE) y varias embajadas, incluidas la británica, estadounidense, australiana y de varios países europeos, rechazaron "cualquier intento" de alterar los resultados electorales o "impedir" la transición democrática.
"Instamos a los militares, y a todos los actores del país, a que se adhieran a las normas democráticas", indicaron en un comunicado conjunto.
Las supuestas irregularidades fueron denunciadas en primer lugar por el Partido de la Solidaridad y el Desarrollo de la Unión (USDP), la antigua formación gubernamental creada por la anterior junta militar antes de disolverse.
El USDP fue el gran perdedor de las elecciones, al lograr solo 33 escaños, y se ha negado a aceptar los resultados, llegando a pedir que se celebren nuevos comicios organizados por el Ejército.
LA GRAN INFLUENCIA POLÍTICA DE LOS MILITARES
Los militares, que redactaron la actual Constitución en un plan de ruta para lograr una "democracia disciplinada", cuentan con grandes poderes en el país, ya que ostentan el 25 % de los escaños del Parlamento y los influyentes Ministerios del Interior, Fronteras y Defensa.
Pese al varapalo del USDP, el jefe del Ejército afirmó pocos días después de la votación que los resultados debían ser aceptados, cuando ya se conocía la victoria de la NLD.
El Carter Center -organización creada por el expresidente de EE.UU. Jimmy Carter que envió observadores el día de los comicios- emitió un comunicado en noviembre en el que afirmaba que "los votantes pudieron expresar su voluntad libremente en las urnas y elegir a sus representantes", aunque criticó el sistema constitucional y la negación del voto a algunas minorías étnicas.
La victoria electoral de Suu Kyi demostró su gran popularidad en Birmania, a pesar de su mala reputación internacional por las políticas contra la minoría rohinyá, a la que gran parte se le niega la ciudadanía y el voto, entre otros derechos.