La coordinadora de Izquierda Unida en Huelva capital, Mónica Rossi, ha pedido a las administraciones que se "tomen en serio" los últimos estudios científicos respecto a los fosfoyesos y ha reclamado la convocatoria del Órgano de Participación, un foro que "no se reúne desde el pasado 10 de octubre de 2022", pese a "la creciente preocupación ciudadana y la aparición de nuevos datos científicos".
En una nota de prensa, Rossi ha advertido de que "el silencio institucional" ante estos hechos "no solo es injustificable, sino irresponsable". Entre los estudios más recientes, Rossi ha destacado el informe que señala "un aumento de contaminantes en el agua de lluvia en las zonas colindantes a las balsas de fosfoyesos", lo que representa, a su juicio, "un nuevo motivo de alarma para la ciudadanía onubense".
"Este estudio refuerza las advertencias que ya venían lanzando anteriormente expertos universitarios y plataformas ecologistas sobre el impacto del proyecto Restore 20/30 promovido por Fertiberia", ha indicado.
Asimismo, Rossi ha destacado otros datos que "deberían haber sido motivo más que suficiente para reactivar de inmediato el Órgano de Participación". Entre ellos, el análisis del sistema satelital Copernicus, que ha revelado que las balsas "se hunden a razón de 17 centímetros anuales, corroborando estudios previos de la Universidad de Huelva sobre la inestabilidad de los terrenos y las mediciones del sistema LiDAR en el mismo sentido".
Por otro lado, también se ha referido a informes recientes que apuntan a "la acumulación de metales pesados en la población residente cerca del entorno de las balsas, con presencia de arsénico, cromo y otros elementos tóxicos en niveles superiores a los recomendados", lo que eleva, en su opinión, "la preocupación sobre los efectos a largo plazo de esta situación".
"Mientras las evidencias científicas se acumulan, la alcaldesa, Pilar Miranda, guarda silencio y sigue sin ofrecer una alternativa viable al plan de Fertiberia, una solución que no resuelve los riesgos estructurales ni los impactos medioambientales", ha criticado Rossi, quién también ha solicitado que se valore la incorporación de Huelva al proyecto europeo FIC-Fighters, "centrado en el desarrollo de soluciones innovadoras para la valorización y restauración de residuos industriales".
"La problemática de los fosfoyesos no puede seguir tratándose con desidia institucional. Las administraciones deben actuar con responsabilidad y escuchar a la comunidad científica, en lugar de seguir protegiendo los intereses de una empresa que ha generado esta situación", ha concluido la coordinadora.