La propuesta que el grupo municipal Por Sanlúcar Sí se Puede llevará al Pleno municipal del próxima martes ha caído como un jarro de agua fría en el mundo cofrade sanluqueño por las consecuencias que, algunas de las medidas, pudieran tener sobre su actividad y sobre la Semana Santa sanluqueña.
El origen de la moción es la polémica suscitada a raíz de la intención de colocar un monumento a la Virgen del Rocío, cuya ubicación lleva siendo objeto de debate en los últimos meses. De ahí que Podemos Sanlúcar haya elaborado una propuesta sobre ‘Laicidad de las instituciones y espacios públicos’ para la que han “consultado con expertos en la materia y escuchado a colectivos culturales y sociales de la localidad”.
La iniciativa recoge 18 puntos en los que destaca, entre otros, “que no se instalen más símbolos religiosos en ninguna plaza o vía pública de nuestro pueblo”. Otro de los puntos es el relativo al papel de los concejales en cuanto a las manifestaciones religiosas que se celebren en la localidad. Se trata del punto 5 que recoge expresamente que “Los miembros de la corporación local y el personal al servicio de la Administración municipal no mostrarán, en el ejercicio de su cargo o sus funciones, ningún gesto de sumisión o veneración de símbolos o imágenes religiosas, ni participarán en función de su cargo en dichas manifestaciones religiosas”. Otro de los puntos, el séptimo, podría afectar directamente tanto al Consejo de Hermandades como a las propias hermandades sanluqueñas y la celebración de la Semana Santa local, ya que recoge que “no se donará ni se facilitará suelo público, ni locales, ni se concederá financiación pública o exenciones fiscales municipales para la instalación de infraestructuras o realización de actividades a ninguna confesión o institución religiosa por el hecho de serlo, sino que tendrán el mismo tratamiento que cualquier ciudadano o entidad privada”. El siguiente punto pide “elaborar un censo para conocer los locales, viviendas o espacios rústicos que estén exentos del pago del IBI en la ciudad” y pide al Ayuntamiento “que sepronuncie a favor de que se modifiquen las leyes para que todas las entidades religiosas y de otra naturaleza ideológica no tengan exenciones de impuestos municipales”.
De igual forma, la iniciativa recoge en el punto número 11 que “el Ayuntamiento facilitará que las ceremonias o actos civiles y confesionales se puedan celebrar, sin obstáculos, dando a la ciudadanía todo tipo de facilidades para ello y poniendo la adecuada infraestructura pública para ello sin que haya ningún tipo de privilegio por el hecho de que fueran actos confesionales o religiosos”.
A raíz de la polémica que la propuesta ha suscitado, desde Podemos inciden en que “ni prohibimos ni proponemos prohibir la Semana Santa ni las festividades de ninguna comunidad religiosa”, y se muestran conscientes “de la delicadeza y respeto con que debe ser tratado cualquier cuestión relativa a los sentimientos y creencias”. Es por ello que enmarcan su propuesta como “una reivindicación de la puesta en práctica del principio que regula la relación de la Administración pública con las religiones que profesa la ciudadanía” y recuerdan el artículo de la Constitución Española que señala que “ninguna confesión tendrá carácter estatal”.
Malestar de hermandades
De momento no ha habido un pronunciamiento oficial por parte del Consejo local de Hermandades y Cofradías de Sanlúcar que esperará a reunirse con los hermanos mayores de las distintas cofradías sanluqueñas para adoptar un posicionamiento consensuado al respecto. El malestar es notable entre los máximos responsables de las hermandades sanluqueñas, que incluso barajan la opción de acudir al Pleno para estar presentes en el momento en el que se trate el asunto. Con todo, no confían en la que la propuesta de Podemos salga adelante y se muestran “muy disgustados” con la misma. “Una semana sin Semana Santa es impensable”, señalan fuentes cercanas al Consejo en alusión a la supuesta eliminación del soporte que el Ayuntamiento presta a las cofradías para la organización de este evento religioso.
Si bien en un principio la propuesta se había presentado como moción, ésta ha sido desestimada en comisión informativa, por lo que finalmente quedará como ruego.