El Ayuntamiento de Sevilla, a través de la Delegación de Limpieza y Educación Pública, dirigida por la teniente alcalde socialista Marisa Gómez, ha reforzado la plantilla de la empresa municipal de limpieza (Lipasam) con 170 contrataciones para hacer frente a las "quejas" vecinales en relación al estado que presenta el viario público, centrándose en las próximas semanas en la limpieza de contenedores y la recogida de naranjas.
En declaraciones a los medios tras participar este lunes en las actividades del programa 'Científicas. Pasado, presente y futuro', organizado en la Casa Consistorial, el alcalde de la ciudad, Antonio Muñoz (PSOE), ha anunciado que Lipasam cuenta con más personal para empezar a ejecutar el compromiso del primer edil de que los sevillanos empiecen a "notar" la "mejoría".
Así, la nueva Delegación de Limpieza ha "lanzado" los primeros planes de acción cuyas primeras intervenciones se centrarán en la limpieza de contenedores y en la recogida de las naranjas amargas, y todo en "coordinación y acercamiento" a los distritos, a fin de que sean ellos los que ayuden a Lipasam a identificar "los puntos negros y de mejora".
Igualmente, el alcalde ha aludido a una mayor coordinación entre las diferentes áreas del Ayuntamiento para "evitar zonas de sombra", aludiendo a las dudas sobre las competencias de limpieza en ciertos espacios de la ciudad. Muñoz ha recordado, por último, que, con el inicio de su mandato el pasado 3 de enero, se marcó el "objetivo básico" de "mejorar la limpieza" ante las quejas recogidas en reuniones y encuentros con asociaciones vecinales.