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Sevilla

Arranca la rehabilitación de la Fábrica de Vidrio y la Algodonera de Alcosa

Sevilla anuncia 1.127 nuevas viviendas en la Algodonera de Alcosa y otras 208 en la Fábrica de Vidrio

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  • Las obras de urbanización, con 1,78 millones de euros de inversión, se compatibilizarán con las de los tres edificios de viviendas
  • Serán 208 viviendas y 6.000 metros de zonas verdes, con áreas peatonales, plazas públicas y parques infantiles
  • El modelo aplica criterios medioambientales con sombra y ahorro de agua y energía

El suelo sevillano está de enhorabuena. El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, ha participado este lunes en la colocación de la primera piedra de las obras de urbanización de los suelos de la antigua Fábrica de Vidrios de La Trinidad, en el barrio de la Macarena, a la vez que, minutos después, ha dado también el pistoletazo de salida a las obras del proyecto de urbanización en la Algodonera de Alcosa. 

Es un día histórico para el barrio y para tantos vecinos y vecinas de la Macarena que han luchado para la recuperación de la Fábrica de Vidrios

Muñoz ha considerado que se trata de "un día histórico" para el conjunto de la ciudad, puesto que se tratan de dos proyectos que eran "asignaturas pendientes" para la capital. 

La Fábrica de Vidrios, más de 27.000 metros cuadrados 

A primera hora de la mañana el barrio de la Macarena se ha convertido en escenario de inauguración. Con una inversión total de 30 millones de euros se llevará a cabo la rehabilitación de la antigua joya industrial sevillana e irá parejo a la construcción de unos 208 edificios de viviendas, junto a espacios libres, peatonales, zonas de juego y zonas verdes.

“Es un día histórico para el barrio y para tantos vecinos y vecinas que han luchado para la recuperación de la Fábrica de Vidrios. Este es el resultado de un trabajo intenso durante los últimos años de planificación urbanística y labor técnica que se ha realizado en coordinación con los vecinos y vecinas y especialmente con la plataforma Salvemos la Fábrica de Vidrios de La Trinidad, a quienes traslado mi agradecimiento. Un espacio urbano que se desarrolla ahora de la mano de inversores privados y a partir de un modelo previo acordado con el movimiento asociativo y que dará nueva vida a una superficie de 27.145 metros cuadrados pendiente en el corazón de la Macarena desde que hace más de dos décadas cesara la actividad industrial”, ha asegurado el alcade. 

En concreto, la Junta de Compensación ha iniciado hoy la primera fase de las obras de urbanización de los suelos de la antigua fábrica, con una inversión de 1,7 millones de euros y que se prolongarán durante diez meses. En paralelo, se irán construyendo los edificios para las 208 viviendas previstas en el proyecto, que se distribuyen en seis bloques, tres de ellos ya con sus respectivas licencias de obras. Se mantendrán las naves principales, que tendrán uso como equipamientos y donde se desarrollará una gran iniciativa sobre el patrimonio industrial de la ciudad de acuerdo con un trabajo que se quiere consensuar con la plataforma Salvemos la Fábrica de Vidrios de La Trinidad. De hecho, se han solicitado ya fondos europeos por un importe de 5,7 millones de euros para poner en marcha esta última iniciativa.

Si bien las naves principales de esa fábrica, que ocupan una superficie de 7.400 metros cuadrados, se mantienen para proteger este patrimonio arquitectónico industrial, del resto de los suelos han resultado seis parcelas residenciales que serán las que se urbanicen junto con los restantes espacios, para que puedan edificarse las nuevas viviendas. Estas se localizan en el frente de la Carretera de Carmona y la calle San Juan Bosco y alojarán 208 viviendas. En cuanto a los viarios interiores, se han diseñado para hacer compatible su uso tanto por los peatones como por los vehículos autorizados, por lo que dispondrán de anchuras variables según su uso, y serán pavimentados en plataforma única. Por su parte, las sendas peatonales dispondrán de arbolado de medio y bajo porte que se añadirá al ya existente.

La Algodonera, 50.000 metros cuadrados de zonas verdes 

Tras la Fábrica de Vidrio, el alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, ha asistido al inicio de las obras del proyecto de urbanización de la superficie, más de 11,6 hectáreas, que ocupará la antigua instalación industrial Algodonera Virgen de los Reyes, en Alcosa, que tendrá "un gran impacto sobre la expansión de la barriada, así como en su empleo y actividad económica posterior", tal y como ha apuntado Muñoz. 

Con una inversión de 7,4 millones de euros, la fachada y los torreones mantendrán la protección así como las tres edificaciones principales, que pasarán a ser equipamientos públicos. Además, se proyecta la construcción de 919 viviendas, 451 protegidas, que se alternarán con 50.000 metros cuadrados de zonas verdes y espacios libres.

El proyecto combina distintos usos, desde residenciales, terciarios, de oficinas, espacios públicos y culturales y con un modelo donde conviven viviendas de renta libre y protegidas en una misma urbanización, al tiempo que "facilita la integración" del barrio de Alcosa con los de alrededor.

"Por fin iniciamos la recuperación de esta instalación industrial con un proyecto que supone una gran oportunidad y una gran transformación para el barrio en un marco de colaboración público-privada y con un modelo que va a beneficiar a los actuales vecinos del entorno. Estamos arrancando un gran motor para Alcosa", ha dicho Muñoz en el acto de colocación de la primera piedra.

La urbanización supondrá una inversión de 7,4 millones de euros e incluye todo el entorno sobre el que se actúa, así como el espacio situado entre el frente de la instalación y la calzada de la calle Secoya y se prolongará durante quince meses, aproximadamente. Mientras, la inversión global en todo el complejo superará los 65 millones de euros.

Se incluye en el proyecto la cesión de dos parcelas para 141 viviendas al Ayuntamiento, que se entregarán totalmente urbanizadas y destinadas a vivienda pública. Sus 116.646 metros cuadrados de superficie se encuentran desde hace años abandonados y sin uso, con el consiguiente deterioro de todo el conjunto, en cuyo interior aún se conserva parte de las naves donde se desarrollaban los procesos industriales de la antigua algodonera.

 

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