Los trabajadores de la empresa municipal de limpieza Lipasam han criticado la "agresividad" y las afirmaciones "fuera de contexto" realizadas este viernes por el portavoz del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Sevilla, Francisco Pérez (PP), "en vez de intentar ayudar en esta situación". Además, han instado a que el equipo de gobierno a que expliquen a los ciudadanos el porqué se han subido las tasas de basura un 11 por ciento mientras "se reducen en 4,6 millones la partida para Lipasam, por lo que deben explicar porqué se va a cobrar más a los sevillanos por un peor servicio".
El presidente del comité de empresa de Lipasam, Antonio Bazo (CCOO), que ha ofrecido este viernes una rueda de prensa, ha lamentado que el Ayuntamiento continúe "echando más leña al fuego en vez de tener un talante mediador", con lo que asegura provocará un "empeoramiento" de la situación "ya de por sí complicada". "Los trabajadores tenemos unas reivindicaciones justas y permanecemos abiertos al diálogo para llegar a acuerdo antes del día 28 de enero para que Sevilla no esté como Granada o como estuvo Jerez de la Frontera", subraya, tras explicar que los trabajadores contaban con unas malas condiciones laborales en sus inicios y se han ido "dignificando poco a poco", algo que el Ayuntamiento "pretende hacer ver como un delito".
Además, recuerda que este jueves se acordó por "unanimidad" en asamblea llevar a cabo una huelga indefinida a partir del día 28 de enero, después de que la última reunión con el equipo de gobierno de Juan Ignacio Zoido fuera "una pérdida de tiempo y una tomadura de pelo".
Así, este paro técnico responde a la fórmula elegida por la dirección para aplicar la reducción salarial del cinco por ciento acordada para esta sociedad municipal, así como el modelo de aplicación de la ampliación de la jornada laboral a 37,5 horas semanales.
En este sentido, señala que la "única propuesta" dada por el Ayuntamiento en la última reunión fuera que los trabajadores eligieran "de dónde querían que se les quitara los 3,3 millones de euros que quieren ahorrar", apuntando al salario, pagas o descansos, entre otros. "Es una tomadura de pelo ante nuestras reivindicaciones que son claras y argumentadas", indica Bazo, que subraya el apoyo de la plantilla a esta acción, indicando que casi se ha duplicado la asistencia habitual a la asamblea, donde unos 250 trabajadores han votado "unánimemente" sí a la huelga.
Además, lamenta que "no haya propuestas" por parte del Ayuntamiento, sino "sólo críticas a unas reivindicaciones legítimas" por parte de la plantilla, que se ve "reflejada" con la situación que se vive actualmente en el servicio de recogida de basuras de Granada. "Estamos abiertos al diálogo, a pesar del absolutismo total por parte del Consistorio, que habla de salarios muy altos de la plantilla, donde los peones cobran 721 euros al mes, frente a los 100.000 del gerente o los salarios similares de otros altos cargos", matiza, tras indicar que el resto de sus pagas corresponde a pluses de dedicación, teniendo en cuenta que trabajan de noche, festivos y "los 365 días las 24 horas".
"No están tratando con desprecio simplemente por reivindicar nuestros derechos y pretenden echar en contra de los trabajadores a la opinión pública", sentencia, tras insistir en su apertura al diálogo.
REDUCCIÓN SALARIAL "PURA Y DURA"
Bazo relataba con anterioridad que el plan de ajuste promovido por el Ayuntamiento de Sevilla para atenerse al mecanismo estatal de pago a proveedores contemplaba una rebaja salarial del cinco por ciento en esta sociedad municipal, en 2012 esta medida fue aplicada reduciendo un cinco por ciento el capital global destinado al capítulo de personal en las cuentas de Lipasam, con lo que el recorte en cuestión fue diluido en diferentes aspectos del capítulo de personal, pero no tuvo incidencia directa sobre las nóminas de los trabajadores. Sin embargo, la dirección de Lipasam pretende aplicar en 2013 "una reducción salarial pura y dura" en los emolumentos que mensualmente reciben los empleados por su trabajo.
Además, los representantes de la plantilla se oponen a la fórmula diseñada por la dirección de Lipasam para aplicar el real decreto Ley 20/2011 de medidas presupuestarias, tributarias y financieras para la corrección del déficit público, que entre otros aspectos y recortes amplía a 37,5 horas semanales la jornada laboral del sector público.
Según Bazo, Lipasam aplica desde el pasado mes de septiembre esta ampliación de la jornada laboral, pero ahora, la dirección de esta sociedad municipal "pretende que trabajemos 35 horas semanales y que las horas restantes hasta las 37,5 sean trabajadas en días marcados como descansos en Semana Santa, la Feria de Abril o la Navidad", extremo que tendría una repercusión directa sobre las contrataciones eventuales que Lipasam promueve en estas fechas para que sus servicios se atengan al incremento de la demanda y los descansos de la plantilla. Según Bazo, esta fórmula afectaría a "más de 400 contrataciones" eventuales que tradicionalmente realiza Lipasam en tales periodos para reforzar su plantilla a través de su bolsa de empleo.
