La Guardia Civil imputa dos presuntos delitos de homicidio y tráfico de sustancias estupefacientes a los detenidos en relación a la muerte por disparos de arma de fuego de un varón magrebí ocurrida el pasado lunes en la localidad sevillana de El Coronil, que han pasado en la mañana de este jueves a disposición judicial, han informado a Europa Press fuentes del Instituto Armado.
Las mismas fuentes han precisado que ha sido a las 11,30 horas cuando los agentes de la Guardia Civil han puesto a los dos detenidos a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Utrera, que podría decretar el secreto de sumario del caso a petición de la propia Benemérita.
Hay que recordar que los dos detenidos fueron sorprendidos por los agentes, el mismo día de los hechos, en un autobús regular de línea con manchas de sangre en sus ropas.
Los hechos ocurrieron pasadas las 12,20 horas del lunes en una vivienda de la calle Corredera, donde un varón de origen magrebí y de 35 años de edad murió víctima de impactos de bala. El sujeto, tras encajar los disparos, habría abandonado la vivienda en un intento de huir de su agresor o agresores, desplomándose después en plena calle como consecuencia de los disparos.
LOS HECHOS
Los ciudadanos que alertaban a los servicios de urgencia vía llamada telefónica señalaban que el sujeto, ya en el suelo, sangraba por la cabeza, con lo que podría haber sido alcanzado en el cráneo. Trasladados los facultativos sanitarios hasta la calle Corredera, sólo pudieron certificar la muerte de este hombre.
El alcalde de El Coronil, Jerónimo Guerrero, ya manifestó a Europa Press que el fallecido no es vecino del municipio, si bien llevaba varios días habitando allí. Según fuentes cercanas a la investigación, el fallecido acudía ocasionalmente al municipio, donde pernoctaba en esta vivienda que una vecina de El Coronil tiene alquilada a una familia de magrebíes que, a su vez, cede el inmueble a terceras personas.
Según tales fuentes, el agresor o agresores podrían haber accedido a la vivienda durante la madrugada y habrían esperado en su interior a Mohammed. Un conflicto por asuntos de estupefacientes podría ser el motivo del crimen, perpetrado con un arma de fuego que todavía no habría sido localizada.