Las obras de vallado y puesta en marcha de la Zona Franca de Sevilla se encuentran ya al 50 por ciento y se prevé que queden terminadas a finales de agosto, 15 días antes del plazo máximo marcado. Para estas instalaciones, que quedarán acotadas en un principio en el polígono Torrecuellar, ya hay alrededor de media docena de solicitudes de nuevas empresas que pretenden sumarse a las siete que ya se encuentran ahí. En total, ya se han habilitado 650 metros lineales de los 1.620 metros que componen el vallado de seguridad del área urbanizada de Zona Franca.
La zona ha sido visitada este viernes por la concejal delegada de Economía, Comercio y Relaciones Institucionales del Ayuntamiento de Sevilla, Carmen Castreño; el presidente de la Autoridad Portuaria de Sevilla, Manuel Gracia, y el delegado especial del Estado en el Consorcio de la Zona Franca de Sevilla, Javier Landa, quienes han comprobado el estado de las obras, que comenzaron hace 20 días y que se desarrollan a la altura del Centro Industrial y Logístico de Torrecuéllar de Inabensa hacia la carretera de la esclusa.
Las actuaciones, que cuentan con un presupuesto de alrededor de un millón de euros, incluyen la colocación de 3.400 metros de valla, además de habilitar el acceso norte para vehículos pesados y la sustitución de luminarias, estando todo ello ejecutado al 50 por ciento.
Así, de los 3.400 metros, en el polígono Torrecuéllar se instalarán 1.620 metros lineales de vallado tubular de acero galvanizado móvil, con 3,13 metros de altura y del que ya hay ejecutados 650 metros. A este vallado de seguridad se suman otros 1.800 metros de simple torsión o malla que serán colocados en la zona aledaña que forma parte de la zona franca pero que aún está sin urbanizar.
Según detalla el responsable de Infraestructuras del Puerto, Diego García, la zona franca cuenta con 72 hectáreas, de las que 35 quedan por urbanizar. Las ya urbanizadas pertenecen al polígono de Torrecuéllar, donde aún queda un tercio de espacio sin ocupar por empresas.
Castreño señala que, para llegar a esa fecha tope del 30 de agosto sin problemas, se decidió colocar la valla de seguridad en la zona del polígono y una "más liviana" en el resto, donde aún no hay empresas. "A medida que se vayan instalando se irá retranqueando y abriendo al perímetro. Si hubiera muchas empresas, empezaríamos ya a organizar la otra zona, aunque en la actual hay aún espacio vacío", agrega.
En este sentido, Castreño señala que se cumplirá a tiempo, mientras que Gracia recuerda que la Autoridad Portuaria es la que ejecuta el vallado, a través de la empresa Grucal, "aunque no le correspondía al Puerto, pero para ganar más rapidez".
Tras señalar que habrá que realizarse también una carretera perimetral, conforme avance la zona franca, Gracia menciona que quien quiera instalarse en este espacio hará de presentar una solicitud a la Autoridad Portuaria, ya que "el terreno sigue siendo portuario". "Hasta que se otorga pasan meses, por lo que da tiempo, con la colaboración entre todos tal como se está haciendo, de dar cobertura a todas las necesidades que se tengan".
Por tanto, la zona franca se irá ejecutando "conforme a la demanda", un espacio para el que Landa explica que ya se están recogiendo nuevas peticiones de instalación. "Ahora es cuando estamos reforzando el proactivismo para que las empresas vengan, al verse que Sevilla tendrá una zona franca de forma efectiva. Empiezan a animarse mucho más", incide, a la par que ha se ha informado a la Guardia Civil por escrito de cuando comienza la actividad para tomar las medidas necesarias para que haya más seguridad en la zona.
Así, detalla que ahora hay siete u ocho empresas ya instaladas, como son Sevitrade, Jannone, Hispalense de Líquidos, Inabensa, Transformados Huévar y Terminal Portuaria Esclusa, que gestionan el muelle del mismo nombre. Junto a ellas, ya existen alrededor de media docena de peticiones de empresas nuevas, fundamentalmente industriales.
Landa informa de que el comité ejecutivo del Puerto se reunirá el día 26 para definir unos criterios de admisión para este tipo de empresas, si hubiera competencia entre ellas, estableciendo un orden de prelación. Dice que el prototipo ideal de la empresa es que estuviera establecida fuera de la Unión Europea y se instalara en Sevilla, lo que generaría puestos de trabajo netos. "Hay alguna ya de características similares, que ya tiene oficinas en Sevilla, pero no la parte de fabricación", aclara.
"COMPLEMENTACIÓN" CON CÁDIZ
Preguntado por la relación de la Zona Franca de Sevilla con la de Cádiz, Landa afirma que "no hay mal rollito en ningún caso" y señala que los responsables gaditanos han prestado "toda la ayuda y colaboración a Sevilla en trasvase de conocimiento, del saber hacer y de la experiencia".
"Por ejemplo, si se llama al delegado del Estado en la Zona de Franca de Cádiz, Jorge Ramos, y se le pregunta por cualquier cuestión, inmediatamente la resuelve. La unión entre Cádiz y sevilla es absoluta. No tiene por qué haber competencia entre ambas, sino complementación para buscar sinergias", sentencia Landa, a lo que Castreño suma que "colaborar es ganar todos, porque no tiene sentido competir entre provincias cercanas".
EXPLOTACIÓN DE LA TERMINAL DE CONTENEDORES
Por otra parte, Gracia ha hecho referencia al concurso para el otorgamiento de la concesión administrativa destinada a la explotación de la terminal de contenedores en la dársena de Batán después de que el anterior concurso fuera declarado desierto debido a que ninguno de los dos licitadores ha justificado la viabilidad de las ofertas presentadas.
En este sentido, señala que la comisión técnica ya ha abierto los tres primeros sobres de las ofertas, mientras que el día 26 se abrirá el de la propuesta económica, tras lo que la comisión realizará una propuesta para la contratación. Cabe recordar que a este concurso sólo se había presentado una oferta, la de Terminal Marítima del Guadalquivir. Gracia añade que, por el momento, no ha llegado al Puerto "nada" por el anterior concurso, refiriéndose a posibles reclamaciones o o denuncias.