El
Plan Estratégico Sevilla 2030 es el documento marco que orientará la acción de Gobierno de Juan Espadas estos cuatro años. Para su coordinación, el alcalde contará con
Gaspar Llanes Díaz Salazar, secretario general de Economía de la Junta de Andalucía desde 2010 hasta 2018, y al que Espadas fichó para su equipo de
campaña electoral.
Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de Sevilla, es
funcionario de carrera y pertenece al
Cuerpo de Administradores Generales de la Junta desde 1988.
Al igual que en la elaboración, la ejecución del Plan Estratégico requerirá del concurso de agentes sociales, institucionales y, muy especialmente, empresariales. ¿Cómo articulará Juan Espadas esa colaboración de la patronal? Su propuesta -que esbozó en Cajasol el día 2 de mayo- pasa por la constitución de un
Consejo Empresarial de Ciudad que sirva para “afianzar esa
alianza público-privada en el desarrollo de los proyectos estratégicos de ciudad tanto de
desarrollo urbanístico, de infraestructuras o de protección del patrimonio”.
Dentro del centenar de proyectos que el alcalde asegura que están en marcha y que deberán ser una realidad completa en 2023 se encuentran los relacionados con la movilidad. Espadas buscará hacer un frente común con los empresarios para reclamar en Madrid, y donde sea necesario,
conexiones ferroviarias; retomará el proyecto de
ampliación del tranvía hasta Santa Justa para que, desde ahí, sea una plataforma con la que mejorar las conexiones con Nervión y Cerro Amate, así como con el Centro y el aeropuerto; peleará el comienzo de las obras de
nuevas líneas de Metro...
En materia de vivienda, el nuevo plan municipal prevé la construcción de más de
1.000 viviendas protegidas, así como otro millar en régimen de alquiler asequible que harán promotores privados. En el anterior mandato ya se constató la reactivación del sector de la construcción, con un volumen de
licencias concedidas que superó los
700 millones de euros. En un horizonte no muy lejano, se pondrán en carga bolsas de suelo muy importantes, como es el caso de
Metrovacesa en
Palmas Altas, con
2.700 pisos previstos. Precisamente, Palmas Altas protagonizará uno de los mayores cambios urbanísticos y económicos de la ciudad en los próximos cuatro años, con la apertura en unos meses del
centro comercial denominado Lagoh. Allí irá, previsiblemente además, la
Ciudad de la Justicia.
Siguiendo la línea del río, el
Puerto, Cartuja (el distrito XII de la ciudad, el Distrito Tecnológico) y desde ahí hasta
San Jerónimo serán los tres focos con los que atraer nuevas inversiones a la ciudad. Inversiones relacionadas con la innovación, el talento y la tecnología.
Hay también dos proyectos con nombres propios:
Altadis y Gavidia. En el caso del primero, el acuerdo, que pasa por una modificación del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU), se ha anunciado en numerosas ocasiones como inminente. En relación con la Gavidia, ya hay varias empresas que están preparando sus proyectos.
Por último, y en materia de
Patrimonio, Espadas tiene como prioridad
San Hermenegildo, el espacio
Santa Clara, la
Casa Cernuda y la
Fábrica de Artillería, donde una partida de fondos europeos ha permitido empezar un proyecto para convertirlo en centro cultural.