“El retraso en la formación de las parejas, las fórmulas alternativas de convivencia, la caída de la fecundidad y el retraso en la decisión de tener hijos, así como la disminución del número de vástagos por familia (…) son las manifestaciones más visibles de una sociedad en proceso de cambio desde las estructuras más enraízadas”. Como consecuencia de esto, los hogares sevillanos formados por parejas sin hijos pasarán a representar en 2040 un 27% del total, frente al 20% que eran en 2018. Es decir,
más de una cuarta parte de los hogares sevillanos estarán formados por parejas que no tendrán hijos.
En el caso de los
hogares compuestos por parejas con hijos, la caída es de en torno a diez puntos entre 2018 (algo más del 40%) y 2040 (poco más del 30%). Pese al “bajo dinamismo observado y previsto en la evolución de las
parejas con hijos, seguirá siendo la
forma de convivencia más habitual en Andalucía y, en 2040, llegaría a representar casi la mitad (49%) del total de la población residente en hogares”, recoge el informe
Proyección de los hogares de Andalucía 2018/2040, publicado hoy por el
Instituto de Estadística de Andalucía (IECA) y que ha sido elaborado con datos de la Encuesta de Población Activa y de la proyección de la población de Andalucía, provincias y subregiones 2016/2070.
En el año 2018, Andalucía contaba con 3,2 millones de viviendas familiares, por lo que el tamaño medio de los hogares se situó en 2,6 personas por hogar. La proyección hecha por el IECA prevé que el número de hogares sea de 3,6 millones en 2040, lo que equivale a 17.000 hogares nuevos cada año. En contraste, el crecimiento de la población permanecerá “prácticamente constante”. ¿En qué se traducirá esto? En una
pérdida del tamaño medio de los hogares de 0,3 miembros, pasando así de los 2,6 de 2018 a los 2,3, un tamaño en la media de nuestro entorno, caso de Francia, o en la media de la Europa de los 28 (2,3 personas por hogar).
La conclusión del informe del IECA es contundente y dibuja un panorama con retos muy importantes para el futuro:
el número de hogares crecerá en los próximos años a un ritmo tres veces inferior al observado en el periodo 2002/2018, ganando peso en esa radiografía los hogares unipersonales y de parejas sin hijos. No obstante, los hogares conformados por parejas con hijos en 2040 seguirán siendo los mayoritarios (49% del total de la población).