El Betis tuvo que conformarse con el empate en el estadio de Ipurúa, en un partido en que fue el claro dominador de la pelota y el equipo que contó con más ocasiones de gol durante todo el encuentro.
El conjunto verdiblanco disparó a puerta en un total de catorce veces. De esos disparos, tan sólo seis fueron entre los tres palos que defendía Dmitrovic. Es decir, el Betis chutó a portería el doble de veces que el Eibar, que sólo disparó tres.
También superaron a su rival en los saques de esquina; el conjunto verdiblanco botó siete corners y el conjunto armero apenas dos durante todo el encuentro.
Además, el equipo de Rubi tuvo el 64,3% de la posesión y realizó un total de 524 pases con éxito. Superando el 84% de precisión. Muchos más que los 289 que acertó el conjunto eibarrés y sólo tuvo un 66% de precisión en sus envíos.
El Real Betis fue superior al Eibar en cuanto a dominio de balón, ocasiones de gol y disparos a puerta durante todo el partido, pero la falta de puntería alejó al conjunto verdiblanco de la victoria y de paso, de los puestos europeos.