La residencia de ancianos que gestiona Asisttel en Tomares (Sevilla) ha comenzado esta mañana a ser desalojada cumpliéndose la orden de desahucio del propietario del edificio ante el impago de las cuotas de alquiler del mismo en los últimos meses.

Según han explicado a Efe fuentes de la residencia, el límite que tienen para dejarla vacía es el lunes próximo a las 10.30 horas, después de que durante la jornada de hoy se hayan comenzado a vaciar las oficinas, con varios camiones de mudanzas en la puerta del centro.

Las familias de los ancianos, por su parte, están gestionando el traslado a otros centros, que se espera culminar antes del lunes.

El edificio es propiedad de un fondo de inversión que ha reclamado varias cuotas pendientes de pago y ha pedido el desalojo del edificio, que solo se podrá evitar si se acepta antes del próximo viernes un plan de pagos que se ha presentado ante el juez que instruye el caso.

Los trabajadores conocen la situación desde mediados de enero, y son unos 50 los que ahora se quedarán sin trabajo.

El primer desahucio ya fue parado el pasado enero, aunque esta vez se ha hecho efectivo.