Ya está izada la bandera de Finlandia en la sede de Bruselas, ya es miembro de la Alianza. Ya está rota su neutralidad. Finlandia ha entrado en la OTAN coincidiendo con el septuagésimo cuarto aniversario de la organización, que nació el 4 de abril de 1949, la cual proporcionará considerables fuerzas militares bien entrenadas y con un vasto ejército de reservistas (es el cuarto país con más reservistas) y novecientas mil personas preparadas para el servicio; país con el servicio militar obligatorio y unos 22000 soldados en activo y reservas de buques de guerra y submarinos, que lo posicionan como la undécima flota naval más fuerte del mundo (según la Global Fire Power).
La actual frontera terrestre de la OTAN con Rusia, pasaría de 1300 km a 2600 km y como consecuencia, el acceso costero de este país a su enclave con Kaliningrado y San Petersburgo queda más aislado.
Finlandia ha tardado en entrar en la Alianza sólo un año desde su solicitud, mientras que Ucrania lo llevaba pidiendo desde 2008. Ha recibido una buena bofetada sin mano, además de ser invadida. Y, según parece, ha tardado más su entrada por la exigencia de Turquía de que fueran extraditados 33 individuos considerados “terroristas” kurdos e islamistas, a lo que la OTAN ha obedecido. También España se verá afectada, pues la Turquía rearmada seguirá perjudicando el Mediterráneo, pero España ha aprobado el ingreso de Finlandia y aprobará el de Suecia, sin conseguir de la Alianza el amparo expreso de Ceuta y Melilla frente a Marruecos, que quiere las dos ciudades porque cree que son suyas y les pertenece.
Lo curioso es que en Finlandia, un país considerado mundialmente como muy democrático, y de lo cual presume, no ha tenido un Referéndum para su entrada en la Organización. Según el gobierno, no se vota porque no hay tiempo que perder; o por miedo a que los “hackers” rusos intervengan en las elecciones; o porque el tema es demasiado importante y complejo como para someterlo a referéndum o porque no se tiene demasiado interés en el mismo. Pero la oposición a la OTAN suma un tercio del país. Motivos incongruentes, en mi opinión, por lo que me pregunto por qué ni Suecia ni Finlandia han consultado al pueblo decisión tan importante.
Lo cierto es que la bandera ya está izada y la mayoría de los periódicos dan a entender que el ingreso de este país en la Alianza es un desastre geoestratégico para Putin ya que dicha Alianza cerraría el Báltico y debilitaría considerablemente la posición en el noroeste de Europa. Y yo me vuelvo a preguntar qué haría si me acorralaran en mi misma casa y me rodearan de misiles nucleares.
¿Cuántas personas saben que la OTAN bombardeó Yugoslavia? Posiblemente muchísima gente lo desconoce, pero el hecho está ahí. En el año 1999, EEUU, Francia, Alemania, etc...realizaron bombardeos aéreos contra Yugoslavia, un país europeo, que por aquel entonces estaba constituido por Montenegro y Serbia. Dicho bloque objetó que lo que pretendía era la limpieza étnica de los albanokosovares, provocando una persecución contra los serbios, lo que incitó a un éxodo masivo. Las bombas mataron a unos 3500 civiles en los ochenta días que duró el ataque en el año 2004. Y todavía, a día de hoy, el uranio empobrecido de las bombas de la OTAN sigue matando a niños en Bosnia y Herzegovina, pero de ello no habla nadie, eso no importa. Lo fundamental para el imperialista es arrinconar a Rusia y quitarle poder. ¿Eso es lo realmente conveniente, obedecer y estar bajo el yugo del imperialista estadounidense? Ya se está realizando el cambio en la geopolítica mundial. Pero Rusia no se quedará con los brazos cruzados, no, sino que acrecentará aún más su existencia en el Báltico y en el Ártico ¿y cuáles serán las consecuencias? Apelemos a la cordura, señores.
