Esta mañana, los dos hijos, Octavi y Sergi, depositaron en este centro salmantino los 12.000 negativos del fotógrafo en dos maletas y un archivador, según reconocieron a Efe tras entregar el archivo a la directora del Centro, María José Turrión.
Octavi Centelles ha asegurado que de esta manera “acaba la polémica”, surgida con la Generalitat de Cataluña después de que los herederos del fotoperiodista catalán anunciaran la venta de su archivo al Ministerio de Cultura, que les abonará una cantidad total de 700.000 euros.
La única condición que se puso es que el archivo quedara unido, “sin disgregarse”, por lo que se decidió depositarlo en el Centro de la Memoria Histórica de Salamanca, según ha explicado Octavi Centelles.
También recordó que la venta al Ministerio de Cultura se hizo tras haber recibido diferentes ofertas de compra de los fondos por parte de entidades sociales, particulares y empresas de subastas, además de la Generalitat de Cataluña.
Los motivos por los que se decidió aceptar la oferta del Ministerio, frente a otras como la de una casa de subastas londinense “que la triplicaba”, se han basado en “una mayor difusión y un mejor proyecto expositivo”.