La Plataforma en Defensa del Tren Rural en Andalucía (PTRA) continúa con el desarrollo de la hoja de ruta acordada en la asamblea celebrada por el colectivo del pasado 5 de noviembre en Bobadilla Estación para lo que han convocado su próxima cita reivindicativa: el 13 de diciembre pedirán un tren “de todas y para todas las personas” en Andalucía, para lo que hacen un llamamiento a los ayuntamientos y colectivos sociales y vecinales de los pueblos y ciudades andaluzas a concentrarse simbólicamente ante las casas consistoriales o estaciones de tren a las 11.00 horas.
Además de su carácter de protesta, desde la plataforma esperan que les sirva para tener una visión general de los lugares “donde se quiere rescatar y usar el ferrocarril como medio de transporte que vertebre el territorio y dé servicio a su vecindad”, además de servir “como elemento de lucha contra la Andalucía vaciada” y aportar al cuidado del planeta.
La movilización se plante además como el paso previo a las marchas que se iniciaran el 13 de enero 2024 en Bobadilla Estación en Málaga para llegar hasta Córdoba, con el fin de denunciar “el abandono actual y en los últimos diez años de la Línea convencional Bobadilla-Córdoba”, que consideran que “pese a estar perfectamente equipada, electrificada, con andenes recrecidos…, no cuenta con ningún tren que dé servicio de transporte público ferroviario a poblaciones como Fuente de Piedra, La Roda de Andalucía, Casariche, Puente Genil, Aguilar de la Frontera, Montilla, Montemayor, Fernán Núñez,…”, lo que supone que se “mantenga a sus poblaciones aisladas tanto con sus capitales de provincia como con los pueblos y ciudades de sus comarcas y con el resto del territorio andaluz”.
Desde esta plataforma ciudadana se ponen así de nuevo en valor “las bondades del ferrocarril público como medio de transporte más vertebrador del territorio, limpio, seguro y sostenible además de reclamar el uso de las infraestructuras ferroviarias existentes y sus estaciones como elemento clave contra la despoblación del medio rural andaluz”. Para ello, se exige a los distintos gobiernos “una planificación de servicios ferroviarios que garantice la movilidad de la ciudadanía de nuestros pueblos y ciudades medias, garantizando un flujo adecuado en las frecuencias de los trenes, la conectividad con otros medios de transporte convirtiendo a las estaciones de tren en enclaves intermodales de transporte y unas tarifas asequibles que conviertan el uso del tren en el medio de transporte prioritario para todas las personas”.