El Reglamento Orgánico del Ayuntamiento de Rota se verá renovado de manera integral tras un acuerdo por mayoría entre los grupos socialista y mixto de la Corporación Municipal para hacer del reglamento más importante del Ayuntamiento, “más democrático” e “integrador”.
El portavoz del Partido Socialista en la Corporación y teniente de alcalde, Daniel Manrique, y los portavoces del Grupo Mixto, constituido por los portavoces de Ciudadanos, Gilberto Bernal, Izquierda Unida, Pedro Pablo Santamaría, así como los concejales independientes Esther Ceballos y Moisés Rodríguez, han dado a conocer el acuerdo alcanzado para renovar integralmente el Reglamento Orgánico Municipal. Esta consiste en una norma que sustituirá al actualmente vigente desde 1992, y que regula el funcionamiento interno del Ayuntamiento, la responsabilidad y competencias de los concejales, los organismos, la composición del pleno según las distintas tipologías de concejales y, por lo tanto, la cuantía económica que recibirá cada concejal y cada grupo.
Tras treinta años con el mismo Reglamento Orgánico vigente y nueve reformas, para llegar al acuerdo que se llevará a pleno para ser aprobado este próximo jueves en la sesión plenaria ordinaria del mes de marzo, los diferentes grupos de la Corporación expusieron incoherencias y disfunciones por las que se hacía necesario reformar el reglamento. Todos excepto el grupo municipal del Partido Popular, que no ha secundado la reforma integral expuesta.
Sobre todo, el principal y motivo más destacado para la reforma de este reglamento es la distribución y competencias de los partidos que consiguieron tan sólo un concejal en esta legislatura ya que, los partidos con menos de dos concejales estaban obligados según el actual reglamento a conformar un grupo mixto, en el que se integraron Ciudadanos, IU, Podemos y Vox. Sin embargo, según el reglamento, esto conlleva a que cada uno divida el tiempo de intervención -los cinco minutos-, algo que, “merma los derechos de la representación política al ser tiempo insuficiente para exponer cualquier idea”, apuntaba Manrique. Sin embargo, desde principio de la legislatura, la flexibilidad del alcalde, expusieron en rueda de prensa, ha permitido que, a pesar de este reglamento, en cada pleno cuente cada portavoz con 5 minutos. Algo que no contempla el Reglamento orgánico. De eso se trata esta nueva ordenación integral que se retomó tras la pandemia hace un año y medio, de “mejorar el texto actual” para que sea más “integrador”.
La igualdad de la representatividad en la cámara y los plenos es un punto fundamental en el nuevo reglamento, y otra de las medidas novedosas en esta línea es que los mismos derechos también se reflejen en la asignación económica de cada grupo. Es decir, se determina una retribución determinada para el concejal con función exclusiva y otro por asistencia, así también como las asignaciones fijas por cada grupo y por concejal. El primer teniente de alcalde ha explicado que “desde la neutralidad política”, este reglamento recogerá la cantidad fija por grupo, que será igual para todos y, la cantidad variable, que depende del grupo de concejales de cada grupo, irá mermando según el número de concejales, se irá bajando la cantidad por cada concejal según vayan sumando escaños para que “no haya tanta diferencia” entre unos partidos u otros. Una medida, que dice Manrique, se basa en la “solidaridad” del grupo que más percibe porque tenga más concejales pero esto "gana en plus de democracia" y señala al PP de no apoyar la reforma del reglamento.
Este consenso se lleva a cabo ahora para que “no dependiera de la posición en la que cada uno estemos en cada momento”, ha apuntado Manrique, y que sea un debate para decidir “cuánto tiene que cobrar el alcalde con independencia de quién esté en la oposición” al margen de las próximas elecciones, ya que, aunque se aprobará este jueves, no entrará en vigor una vez que se conforme la próxima legislatura. “Es más complicado debatirlo a principio de mandato, que debatirlo ahora cuando nadie sabe en qué posición va a estar”, apunta.
En este sentido, lo que propone este nuevo reglamento, es que los concejales con dedicación exclusiva y por asistencia se mantengan al actual. El alcalde cobrará 52.750 euros anuales, el primer teniente de alcalde, 36.925,08 euros; el concejal con delegación 34.287,46 euros; para los portavoces del gobierno municipal sin delegación, 22.451,44 euros. Por otro lado, las asistencias, que serían las cantidades que percibirían los concejales sin dedicación exclusiva, se mantendrán como: la asistencia a pleno de 600 euros, la asistencia a Junta de Gobierno, 150 euros, la asistencia a la Junta de Portavoces 600 euros, la asistencia a comisiones 200 euros, aunque con límites.
Sin embargo, las retribuciones se verán reducidas en cuanto a las cuantías de los grupos que es lo que variará dependiendo de cada concejal. Por ejemplo, el PSOE, que viene percibiendo por el grupo 30.800 euros anuales, con esta reforma si mantienen los mismos concejales, el grupo recibiría 22.818 euros. Es decir, 8.020 euros menos. Por cada concejal que vaya sumando el grupo, se reducirá el coste de los escaños que ocupen.
El objetivo es que haya un “mínimo de recursos que sean iguales para todos para que se pueda hacer la actuación política necesaria”. Manrique considera que el motivo de que se reduzca la aportación a cada grupo según los concejales es por el cual, el PP no ha apoyado hasta el momento esta reforma y el socialista afea que “si no se acepta esto es no querer plantear la igualdad de todos los grupos”.
El concejal Moisés Rodríguez, ha apuntado para finalizar que esta reforma trata de “ceder algunos aspectos para que todos los intereses estén recogidos”.
