La apertura de este expediente es posible gracias a la posibilidad que brinda la Ley de Patrimonio Histórico de Andalucía y supone la inscripción por primera vez de un palo del flamenco, al que se sumarán otros, explicó la consejera de Cultura, Rosa Torres.
En un período de entre seis y ocho meses, estará lista la declaración, que deberá aprobarse en Consejo de Gobierno, aseguró Torres. Esta tradición cuenta con un buen número de investigaciones que “han dado pie suficiente” para llevar a cabo los trámites y poner en marcha la inscripción dentro del Catálogo General.
Además, tanto la consejera como la directora general de Bienes Culturales de la Junta, Guadalupe Ruiz, han querido que en la fecha de la firma figure la de ayer, 28 de diciembre, que es cuando se celebra la fiesta mayor de los verdiales, que congrega a miles de personas en Málaga.
Los verdiales son una de las manifestaciones artísticas y culturales más relevantes de Andalucía y sus orígenes podrían remontarse a las saturnales romanas.
Se trata de fandangos bailables, de compás ternario, y compuestos de cuatro estrofas de seis versos octosílabos y su celebración se organiza a través de las llamadas pandas, que son agrupaciones que cantan y bailan.